No creo que la actuación individual sea la solución, se puede convencer a unas pocas personas, pero poco más. Para mi la tarea de conectar de verdad con las masas tiene que venir de parte de las organizaciones comunistas y su militantes, no digo que el trabajo de una persona individual este mal, pero creo que es mucho más importante y efectivo el trabajo desde las organizaciones.
Y más que propagar la palabra de Marx y de Lenin, más que con palabras me parece que se consigue con echos. No se trata de convencer a nadie, si no de hacer ver quien lucha con ellos y para ellos, que es lo que en realidad les beneficiaría, estar en cada huelga, en cada lucha de las clases populares por pequeña que sea, aunque sea una simple manifestación de unos cuantos trabajadores de una pequeña empresa, el caso es estar, organizarlos y ayudarles en cada lucha que se pueda plantear.
El obrero que no se mueve pese a lo jodido que esté poco se va a mover por más argumentos que le sueltes, aunque incluso te de la razón, no se mueve muchas veces por el miedo a perder su empleo y ante eso, sin una organización muy fuerte no vamos a poder mover a casi nadie. Pero aquellos obreros que ya lo hacen por voluntad propia, porque están hartos de vivir aplastados y a los que la vida en el capitalismo se les hace cada vez más dolorosa, a esos, si se colabora con ellos y ven que realmente queremos lo mismo, y comprenden de que de poco sirven las acciones esporádicas, si no que tiene que ser una lucha constante, esos si que es fácil que acaben militando combatiendo el sistema si ven que no solo es palabrería, aunque en un principio no sean afines a nuestros ideales, aunque no militen, si ven que pese a todo se combate a su lado, poco a poco aunque no lo deseen y de forma inconsciente, terminarán abrazando la lucha anticapitalista.
Y otro punto que me parece muy importante es abandonar esa prepotencia, esa soberbia, ese dogmatismo y sectarismo que corrompe por desgracia muchas veces a los comunistas españoles. Creo que hay que adaptarse a los tiempos que corren, no tenemos fuerza alguna. Hay que renunciar a muchos planteamientos que aunque en la teoría sean brillantes, en la práctica resultan profundamente reaccionarios. Por poner un ejemplo son los llamamientos a la lucha armada, teóricamente como digo, es un planteamiento irrefutable, pero a la hora de aplicarlo hoy día no se puede, primero porque eso asusta a la gran mayoría de los españoles, y segundo porque, como dijo una vez Pablo Iglesias, vale, ¿pero cuantas divisiones tenéis? Pues es eso creo que en este caso nuestro querido reformista tiene razón, no tiene ninguna aplicación práctica, no podemos hacerlo.
Hay que acercarse también hacia los planteamientos que tienen más calado en la sociedad española, que realmente tiene una voluntad de cambio, pero no la sabemos canalizar hacia nosotros porque la propaganda burguesa ha puesto a nuestro discurso en una posición totalmente desventajosa, y hay que buscar nuevas fórmulas. Tenemos que colaborar con gente como Podemos, acercarnos al 15 M, que es cierto que no son comunistas, pero esa es la población con la que se puede trabajar, detrás de Pablo Iglesias hay miles de personas, detrás dle 15 M o del 22 M, millones. Y estoy de acuerdo en que ninguno nos llevará hacia una revolución socialista, ¿pero de qué sirve quedarse en la cueva? Yo se que Podemos, por ejemplo, no es la organización con la que soñamos, pero es lo mejor que hay en España, de nada sirven esas organizaciones "ortodoxas" que tienen nulo contacto con las masas.
Movimientos como Podemos llevarán a muchos obreros a estadios de conciencia superiores de lo que jamás harán esas organizaciones, no gritarán ¡slava Stalin! Pero se postularán contra el neoliberalismo, saldrán del decadente bipartidismo y atacarán a los mercados y su omnipresencia; y eso es ya mucho más que lo que hacen esos partidos comunistas, que más que partidos marxistas, son tertulias entre amiguetes que se dan palmaditas entre si, pero a los que nadie conoce fuera de su círculo. Nuestro trabajo a de ser colaborar con los sectores más avanzados de la sociedad para aumentar aún más su conciencia de clase, aglutinar fuerzas y una vez tengamos la fuerza suficiente, capaz de tumbar el sistema, abrir un debate contra las medidas reformistas que ya no sirven para nada. Pero por el momento hay que usar lo que hay y abandonar esa prepotencia, porque lo siento mucho, pero tiene más de marxista Podemos (no se malinterprete) que muchas de esas organizaciones virulentas que no salen de la cueva.
Hay que adaptarse a nuestro tiempo y como ya dije, usar lo que tenemos, las organizaciones más avanzadas de la sociedad española. Y solo como una precisión histórica, Lenin militó en el POSDR hasta tener suficiente fuerza el movimiento revolucionario como para combatir y tumbar el sistema abandonando a los sectores reformistas, lo mismo el M 26 J de Fidel, en el que existía un sector comunista que al final triunfó, pero no todo el movimiento lo era.
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